Según el portal inmobiliario Fotocasa, que ha consultado a una inmobiliaria conocida de Barcelona, la rehabilitación de una vivienda de gama media, de unos 70 metros cuadrados y localizada en la ciudad condal, puede aumentar su precio hasta en un 20%. Así, si su valor ronda los 250.000 euros, con las obras puede llegar a aumentar a los 300.000 euros.
Si, por el contrario, se trata de una propiedad de lujo, localizada en ciudades donde la demanda de vivienda es dinámica y activa como, por ejemplo, Madrid o Barcelona, una reforma integral puede revalorizar su precio hasta en un 65%, según las características del inmueble. Por ejemplo, por un piso de unos 200 metros cuadrados, ubicado en un barrio caro, cuyo valor está alrededor de los 1,2 millones de euros, la rehabilitación de la casa puede hacer que esta cueste unos dos millones de euros.
No obstante hay que tener en cuenta que la subida está supeditada a la zona en la que se encuentra el inmueble. Logroño es la capital de provincia donde el propietario de una vivienda puede sacar mayor rédito de la venta de su vivienda tras haber realizado una reforma integral. En este sentido, el informe indica que el precio se eleva un 48%, pasando de los 900 euros el m2 sin rehabilitar a los 1.330 euros/m2.
Muy cerca de Logroño aparece Orense con un incremento del 43%: 1.080 euros el m2 antes de las obras y 1.540 euros después. El tercer puesto lo ocupa Oviedo, donde el precio de hogar puede aumentar hasta un 41% con una rehabilitación, pasando de los 1.000 euros por m2 a los 1.410.
Con respecto a las grandes ciudades, Valencia es la mejor parada al alcanzar un 35% de incremento, mientras que en la particular batalla entre Barcelona y Madrid la que sale ganadora es la Ciudad Condal con un 25% de revaloralización frente al 20% que obtiene un piso reformado en la capital de España.